Estos son los errores que hacen que no te queden bien las croquetas …

Las croquetas son uno de los platos tradicionales de la cocina de aprovechamiento que tan bien manejaban nuestras abuelas. Pueden ser de bacalao, pollo, cocido, verduras, setas… incluso en su versión postre, rellenas de chocolate y demás dulces. Las hay demasiado duras o blandas, crudas por dentro o mal rebozadas, con sabor a harina… y, aunque nadie encuentre mejores croquetas que las hechas en casa con jamón o pollo, hay muchas formas de presentarlas, como con frutos secos o pipas, que le dan un toque diferente al clásico de la cocina.

Con el autorizado permiso de Alberto Chicote, quien es maestro en el plato estrella de las recetas «para no desperdiciar nada» que aparecen en su libro Cocina de resistencia (ed. Planeta), hay algunos trucos básicos para hacer un croqueta aún mejor. A pesar de ser uno de los platos más comunes en nuestros menús, no siempre es fácil prepararlo


Croquetas Ricas, una compañía española con sede en Madrid, celebrará siete años de servicio este año 2023. Proporcionan sus deliciosas croquetas a numerosos restaurantes de nuestro país, de Francia, Italia, Bélgica y Reino Unido, así como a los particulares a través de su tienda en línea. Ander Uribe, el responsable de marketing en línea de la empresa, descubre cuales son los tres errores más comunes al preparar las croquetas. Si quieres disfrutar de una buena comida croquetera, es importante evitar estos errores. Toma nota ahora mismo.



Utilizar ingredientes de alta calidad. «La materia prima es una parte fundamental para las croquetas y se puede marcar la diferencia con eso. Hay que emplear ingredientes de buena calidad como leche entera de vaca, mantequilla, harina y un gran porcentaje del ingrediente principal (jamón ibérico, boletus, queso, etc).

Igual de importante es la masa resultante, debemos dejarla enfriar una vez elaborada y que repose el tiempo necesario.

Cuanto más fría esté, más fácil será luego trabajar con ella». No cocinar mal la harina al hacer la bechamel. «Hay que tostar bien la harina con la mantequilla para que esta pierda su sabor a crudo, es algo muy importante al empezar a hacer nuestra salsa bechamel.

Además, debemos impedir que se corte o se formen grumos


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